Tanto desde la intervención individual como desde el trabajo en pequeño grupo terapéutico, nuestro punto de partida es el vínculo y relación que se establece con el niño.
La intervención psicomotriz incide en la totalidad de la persona desde el cuerpo y el movimiento favoreciendo el conjunto de dimensiones: motriz, afectiva, social, relacional, cognitiva.
Trabajo con todo el entorno del niño/a